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¿Quién es el enfermo?

Laura Galindo
06 de junio de 2025 - 05:05 a. m.
Sara Millerey González
Sara Millerey González
Foto: Germán López
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Esta semana, la Cámara de Representantes aprobó en comisión primera la ponencia de Ley Integral Trans, un proyecto radicado en el 2024 que le permitirá a personas trans y no binarias tener garantías en salud, educación, trabajo y cultura. La aprobó junto a más de 16.000 firmas que la respaldan. La aprobó a pesar de los prejuicios de los antiderechos y del montón de mentiras absurdas que llenaron las redes sociales. Por si acaso: no le van a quitar la patria potestad a los papás que no permitan el cambio de sexo de sus hijos, ni se los van a llevar a una casa de acogida.

Es inverosímil que las sociedades evolucionen, pero sigan existiendo la homofobia –transfobia en este caso puntual– y el prejuicio. El término lo usó por primera vez el sicólogo George Weinberg alrededor de 1960, quien definió la homofobia como “miedo a estar en un espacio cerrado con homosexuales”. Ese miedo, dice Weinberg, es la consecuencia de varios factores: imposiciones religiosas, generalizaciones erróneas y sistemas patriarcales y heterosexistas. En palabras sencillas: es una creencia equivocada que asume la heterosexualidad como norma e invalida cualquier tipo de diferencia. “No es posible decir que un paciente está sano cuando no ha superado su prejuicio hacia la homosexualidad”, escribió en uno de sus ensayos.

Lo más irónico –y cruel– de todo es que la homofobia y el heterosexismo voltearon la balanza durante muchos años y lograron que la homosexualidad y la transexualidad fueran consideradas enfermedades mentales. Que se persiguiera la diferencia, se discriminara, se penalizara y se violentara. El verdadero enfermo, quiero pensar que desde la ignorancia y no desde la malevolencia, resolvió que los enfermos eran otros.

Las consecuencias, sobra decir, han sido espantosas: crímenes de odio, terapias de conversión, torturas, discriminación, violencia sistematizada, ausencia de derechos fundamentales. Durante el 2024, fueron asesinadas 164 personas LGBTIQ+. Una cada dos días y cinco horas. A eso se suma que existe un subregistro en el caso de las personas no binarias. Sin ir muy lejos y poniendo nombres propios, hace dos meses Sara Millerey González fue asesinada a golpes en Bello, Antioquia. Le rompieron las piernas, los brazos y la arrojaron al río.

La pregunta, entonces, se vuelve retórica: ¿quién es el enfermo? ¿El que se sale de una creencia equivocada que se hizo norma a partir del miedo y la ignorancia? ¿O el que sobre la superioridad de una moral falsa se cree con derecho a invalidar la existencia de otros, maltratarlos y discriminarlos?

@LauraGalindoM

Laura Galindo

Por Laura Galindo

Periodista musical y cultural. Pianista de la Universidad Javeriana, magíster en piano de la Universidad Eafit, magíster en periodismo de la Universidad de Los Andes y MFA en Creative Writing de la New York University -NYU-. Editora cultural y presentadora en RTVC Noticias, de Señal Colombia.
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Felipe Cox(18091)06 de junio de 2025 - 11:30 p. m.
Argumentos sólidos. Para lectura en los colegios…
Rubén Darío Lozano Rubiano(70001)06 de junio de 2025 - 05:07 p. m.
Buenos planteamientos. Sin embargo es bueno preguntarnos ¿Evolución de las sociedades o involución? Recuerda que hay muchos otros elementos incluyendo los "llamados culturales" que se han degradado (no los menciono) y prácticas extrañas como humanizar a los perros y deshumanizar a sus dueños. Gracias de todos modos.
  • Mar(60274)06 de junio de 2025 - 05:46 p. m.
    ¿Qué tienen que ver los perros aquí? Por el contrario, apenas se está logrando concientizar a las personas, que los animales también tienen derecho a una vida digna.
Melibea(45338)06 de junio de 2025 - 03:04 p. m.
Me encantan sus columnas como está, denunciar la violencia que instituyó la clase pacata y retrógrada que tiene el poder ha ocasionado mucho dolor y muerte.
Mar(60274)06 de junio de 2025 - 01:45 p. m.
La homofobia, la transfobia y todo lo q tiene que ver con la sexualidad distinta, es mirada mal porque no está destinada a la procreación, a crear más esclavos y esclavas y por eso es mirada mal. no lo dicen con esas palabras, le dicen pecado, pero lo q les importa al fin, es la plata, el negocio, la explotación y las religiones fueron creadas para crear falsas ilusiones y falsos miedos para q la gente se deje explotar con la idea de q lo material no los hace felices, sino, cosas q nadie conoce.
Gilberto R.M.(54899)06 de junio de 2025 - 01:36 p. m.
EE (74899) •Hace 50 segundos Tenía razón un periodista cuando bautizó (a la pseudo/periodista) Vicky Dávila como "LA RABO DE AJÍ". Esa "señora" de estirpe uriBestia es, efectivamente, una peligrosa víbora para la nación y una vergonzante especímen que denigra de la noble y loable labor del periodismo.
  • Martha Barrera(9256)06 de junio de 2025 - 09:11 p. m.
    De acuerdo con el comentario de Gilberto .
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