
Diez militares fueron llamados a reconocer su responsabilidad en medio centenar de falsos positivos cometidos entre 1997 y 2007 en Dabeiba (Antioquia). La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) les imputó crímenes de guerra y de lesa humanidad a cuatro coroneles y seis suboficiales que asesinaron a 49 personas, las hicieron pasar como guerrilleros muertos en combate y, para ocultar sus crímenes, los enterraron como “N. N.” en el cementerio Las Mercedes de este municipio del Urabá antioqueño. En El Espectador le contamos quiénes son...
