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Como Rodrigo Antonio López Estrada y Jesús Antonio Pacheco Oviedo fueron identificados los dos funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía secuestrados el jueves ocho de mayo, en el departamento de Arauca. El Ejército de Liberación Nacional (ELN) se atribuyó el hecho.
Según la información entregada por las autoridades, el secuestro ocurrió en la vereda La Esmeralda, zona rural de Arauquita. Los funcionarios se movilizaban en una camioneta por la vía que comunica al municipio de Fortul, cuando fueron interceptados por hombres armados que se los llevaron.
Tras conocerse la noticia, las autoridades señalaron como responsable a la estructura Camilo Cienfuegos, perteneciente al Frente de Guerra Oriental del ELN. Luego, en la mañana de este viernes, ese grupo armado confirmó el secuestro de los funcionarios, tras ser interceptados en un retén.
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El ELN difundió un comunicado en el que confirmó que los funcionarios, al momento de ser secuestrados, portaban el armamento de dotación de la institución. Además, señaló que se les aplicará “el debido proceso conforme a la normatividad”.
De paso, la guerrilla también se atribuyó un ataque con francotirador que ocurrió ese mismo jueves, en la vereda Caranal, cerca al municipio de Fortul. Un soldado del Batallón Energético y Vial fue herido en ese ataque.
El gobernador del departamento de Arauca, Renson Martínez, rechazó el hecho y exigió la liberación de los funcionarios. “Estas personas estaban cumpliendo funciones istrativas como servidores públicos. Rechazamos estos hechos y hacemos un llamado urgente para que respeten su vida y los liberen sanos y salvos”, señaló el mandatario.
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Durante los últimos meses, el ELN ha mantenido una serie de acciones violentas sostenidas en el departamento de Arauca donde, además, según información de inteligencia militar, se habrían entrenado los hombres que iniciaron el 16 de enero la arremetida violenta en la región del Catatumbo (Norte de Santander).
Los secuestros de funcionarios hacen parte de esa dinámica. Justo esta semana fue liberado el soldado Jaiber Arley Castillo Guerrero, en zona rural del municipio de Puerto Rondón. El uniformado había sido secuestrado la semana anterior por el ELN y durante cinco días estuvo en cautiverio.
Castillo Guerrero, quien hace parte del Batallón de Policía Militar No. 13 de Bogotá, se movilizaba el primero de mayo por la vía que comunica a los municipios de Puerto Rondón y Tame (Arauca). Estaba de permiso, cuando hombres armados interceptaron el vehículo de transporte público en el que se movilizaba y lo secuestraron.
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Luego, el ELN dio a conocer un video en el que confirmaba que tenía en su poder al soldado. Hombres de la Brigada 18 del Ejército desplegaron de inmediato las labores de búsqueda necesarias para dar con su paradero, hasta que en la tarde del martes seis de abril se logró su liberación.
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