
En el año 398 a de C., Esdras, un funcionario de la corte persa en Babilonia, llegó a Jerusalén con una copia de la ley de Moisés, y con esa copia se inició la idea, el concepto de “lo que está escrito”.
Y entonces fue cuando en el año 597 antes de Cristo los babilonios, liderados por Nabucodonosor, llegaron hasta Jerusalén con sus tropas, sus espadas y su deseo de guerra y sometieron al pueblo judío. Retuvieron al rey e impusieron a su propio gobernador, cuyo mandato fue tan devastador y deplorable, que las incursiones babilonias siguieron...

Por Fernando Araújo Vélez
