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Durante enero de 2025, los colombianos gastaron más que en el mismo mes del año pasado, aunque el ritmo de crecimiento fue menor en comparación con meses anteriores.
Según el más reciente informe de Gastometría RADDAR, el gasto de los hogares alcanzó los $93 billones, lo que representa un aumento del 6,33 % en términos nominales frente a enero de 2024.
Sin embargo, al descontar el impacto de la inflación, el crecimiento real del gasto fue del 1,05 %, lo que significa que los hogares tienen un ligero aumento en su capacidad de compra, pero a un ritmo más lento, según RADDAR.
Crece el gasto, pero la cautela también
El año comenzó con un gasto superior al de enero del año pasado, lo que confirma que los hogares han recuperado parte de su capacidad de compra.
Sin embargo, este crecimiento es menor al registrado en diciembre de 2024, cuando el gasto aumentó con más fuerza debido a la temporada de fin de año.
En ese sentido, los datos muestran que las familias están siendo más cautelosas con su dinero en los primeros meses de 2025.
Uno de los factores que explican la desaceleración del gasto es la llegada de enero, un mes que históricamente se caracteriza por ser más restrictivo para las finanzas de los hogares. Después del alto consumo de diciembre, muchas familias reducen sus compras para ajustar su presupuesto y cumplir con obligaciones como el pago de matrículas escolares, arriendos y servicios públicos.
Además, el inicio de año trajo consigo aumentos en algunos gastos fijos que impactaron el bolsillo de los colombianos. Según el informe de RADDAR, las tarifas de transporte y algunos servicios se incrementaron, lo que generó un mayor gasto en estos rubros.
Otro elemento que influyó en el comportamiento del gasto es que, aunque la inflación se mantuvo estable en 5,22 %, algunos productos subieron de precio, especialmente en el sector de alimentos.
Los costos de hortalizas y legumbres aumentaron 7,65 %, y las comidas fuera del hogar subieron 2,05 %.
El gasto por nivel de ingresos
El análisis de RADDAR también muestra diferencias en el comportamiento del gasto según el nivel de ingresos de los hogares:
- Hogares de ingresos bajos: fueron los que más lograron mejorar su capacidad de compra, con un crecimiento del gasto del 0,17 %. Esto se debe en gran parte a la reducción en la inflación de algunos alimentos, lo que les permitió comprar más con el mismo dinero.
- Hogares de ingresos altos: también aumentaron su consumo, impulsados por mejores condiciones de crédito y menores tasas de interés, con un crecimiento del 0,05 %.
- Hogares de ingresos medios: aún no han logrado recuperar completamente su nivel de gasto y registraron una leve caída del -0,04 %, lo que indica que siguen siendo los más afectados por la coyuntura económica.
El informe también señala que los colombianos han recurrido más al crédito para financiar su consumo.
En enero, la colocación de créditos de consumo creció 17,77 %, impulsada por el uso de tarjetas de crédito y créditos de libre inversión. Además, el crédito hipotecario registró un aumento del 47,1 %, reflejando una mayor actividad en la compra de vivienda.
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