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París vivió este fin de semana una montaña rusa de emociones. De la euforia desbordada por el primer título de Champions League en la historia del Paris Saint-Germain, tras una goleada histórica de 5-0 sobre el Inter de Milán en Múnich, se pasó en cuestión de horas a la conmoción nacional por una serie de disturbios violentos que dejaron un saldo trágico: dos muertos, decenas de heridos y cientos de detenidos.
La celebración soñada por generaciones de hinchas parisinos terminó empañada por el caos.
Disturbios en París y el resto de Francia tras la victoria del PSG
— ️ٓ️ (@CocoExiliado) May 31, 2025
Dentro hilo pic.twitter.com/HxYZaQE8ez
El día después de la tormenta
El domingo, la capital sa se vistió de gala para recibir al nuevo campeón europeo. Cánticos, banderas, bengalas y una multitud de más de 100.000 personas se congregaron en los Campos Elíseos, donde el equipo desfiló en dos autobuses descubiertos.
Desde temprano, se escucharon canciones como “We are the Champions” y los goles de la final se repetían en pantallas gigantes. El momento cumbre fue la llegada de los jugadores, pasadas las cinco de la tarde, en un recorrido de cuarenta minutos que culminó frente al Arco del Triunfo, donde se lanzaron fuegos artificiales.
Los jugadores, vestidos con camisetas conmemorativas con el número “25” en la espalda, fueron recibidos como héroes.
Marquinhos, capitán del equipo, tomó el micrófono para liderar cánticos e incluso pidió públicamente el Balón de Oro para su compañero Ousmane Dembelé, quien fue elegido el mejor jugador de esta edición de la Champions por la UEFA.
A su lado, el técnico Luis Enrique y el presidente del club, Nasser Al Khelaifi, celebraban también el logro monumental. La copa, la primera ‘Orejona’ del PSG y apenas la segunda del fútbol francés tras la del Marsella en 1993, desfilaba al ritmo de una ciudad emocionada.
El caos en París, la sombra de la fiesta
La cara oscura de las celebraciones empezó a hacerse visible pocas horas después del pitazo final del sábado. La noche se transformó en pesadilla.
En Dax, un menor de 17 años fue apuñalado mortalmente. En París, un joven que se movilizaba en moto fue atropellado por un automóvil. Además, los disturbios dejaron alrededor de treinta policías y varios bomberos heridos. Uno de ellos se encuentra en coma tras intervenir en un operativo en Rennes.
☪️🇫🇷 FRANCIA
— Emy Ayuso (@emy_ayuso) June 1, 2025
Anoche, en París en la “celebración” de la victoria en Champions del PSG: 2 muertos, 192 heridos, 426 detenidos y cientos de millones de euros en daños en una noche de caos…
¿Cuántas veces más sucederá esto antes de que Europa finalmente despierte? 🤔 pic.twitter.com/CUWd0Idf8D
La magnitud de los desmanes fue tal que el Ministerio del Interior reportó 559 personas detenidas —491 solo en París— y más de 690 incendios, de los cuales 264 afectaron vehículos.
Saqueos, vandalismo y agresiones rompieron el espíritu de unidad que suele caracterizar una gesta deportiva de esta envergadura. El dispositivo de seguridad fue amplio, pero insuficiente para contener la violencia.
El presidente de la República, Emmanuel Macron, condenó los hechos con dureza al recibir al equipo campeón en el Palacio del Elíseo. “Nada puede justificar lo que pasó en las últimas horas, los enfrentamientos violentos son inaceptables”, expresó el mandatario.
“Perseguiremos, castigaremos, seremos implacables”, añadió, visiblemente indignado por el giro trágico que tomaron los festejos.
🇫🇷 3 A.M en París y todavía hay algunas escaramuzas con la policía, quienes intentan avanzar esquivando los fuegos artificiales que les tiran.
— 🥊𝕳 BARRAS DEL MUNDO ⚽🍺 (@Barras_LATAM) June 1, 2025
Por el momento hay 153 detenidos y varios heridos, además, 8 personas fueron atropelladas en distintos lugares pic.twitter.com/9GmOoxHfln
Macron no solo reiteró su rechazo a los actos violentos, sino que también quiso destacar la proeza del equipo. “Lo conseguisteis de una manera sublime, monstruosa, habéis puesto a París en la cima de Europa, es magnífico”, dijo frente a los jugadores, antes de aplaudir la labor de Luis Enrique por construir un equipo “fuerte por su solidaridad, motivación y ambición”.
En su mensaje, el presidente hizo énfasis en que “el fútbol no es eso” y lamentó que los incidentes “privaran a muchos de nuestros compatriotas de lo que debió ser un momento de felicidad y despreocupación”. La frase resonó en medios y redes sociales como una denuncia clara contra la instrumentalización de un triunfo deportivo para justificar comportamientos violentos.
Desde el club también se emitió un comunicado en tono firme: “El Paris Saint-Germain condena enérgicamente los incidentes que empañaron un momento de felicidad colectiva. Este debe ser un tiempo de orgullo compartido, no de agitación o disturbios”. La nota se publicó en X (antes Twitter) y pedía a los aficionados responsabilidad y respeto. Horas antes, el ministro del Interior, Bruno Retailleau, había calificado como “bárbaros” a los responsables de los actos vandálicos y defendió que el operativo policial había estado “a la altura”.
TRIUNFO 🎇 pic.twitter.com/UnJFgFHXRZ
— Paris Saint-Germain (@PSG_espanol) May 31, 2025
El contraste entre la hazaña deportiva y el caos urbano no ha pasado desapercibido. Medios locales hablan de una victoria “manchada”, no por la actuación del PSG —que fue contundente, brillante e histórica—, sino por la incapacidad de una parte de la sociedad para celebrar sin violencia. La imagen del París triunfante, con Marquinhos levantando la copa bajo el Arco del Triunfo, se enfrenta al París de los vehículos quemados y las detenciones masivas.
En ese doble registro emocional, Francia despierta con sentimientos encontrados: orgullo deportivo y vergüenza social. El PSG cumplió la promesa que le debía a su afición desde hace décadas, y lo hizo con un fútbol espectacular, casi irreal. Pero los disturbios plantean preguntas urgentes sobre el manejo del orden público, la cultura del fútbol y el tejido social urbano.
Camille, una estudiante de 22 años que asistió al desfile, lo resumía así: “Ver la copa en persona permite darte cuenta de que realmente sí, que somos campeones de Europa. Ayer era casi demasiado bonito como para ser verdad. Pero hoy, al ver las noticias, una parte de esa alegría se rompe”.
Lo que debía ser una celebración inolvidable por motivos felices lo será también por razones que nadie hubiera querido escribir. París ardió, sí, pero no solo por la pasión del fútbol.
París brilla más que nunca ✨❤️💙 pic.twitter.com/ckK0BfdANA
— Paris Saint-Germain (@PSG_espanol) June 1, 2025
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