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Descansar rodeado de naturaleza. Recuperar energías a la orilla del mar, mientras el agua va y viene, repetidamente, cambiando de forma al encontrarse con nuestros pies. Dejando una leve estela de espuma en ellos, generando un sonido breve, al que adorna el del viento que se transmite en esas olas.
Florida es, quizás, el destino de playa más conocido de Estados Unidos. Un lugar donde prima un clima en su mayoría cálido, que oscila entre los 19° C y los 30° C. Hábitat de diversas especies, terrestres y acuáticas, las cuales son protegidas tanto por locales, como por los visitantes de un lugar que es sinónimo de vida.
Por eso, en la ciudad de Sanibel, a un extremo del Estado del Sol, se encuentra el Bailey-Matthews National Shell Museum & Aquarium. Se trata de un museo de historia natural, el cual cuenta con más de 60 especies marinas que se exponen en estanques y enormes acuarios, así como exposiciones sobre conchas y su interacción histórica con el hombre.
Es un lugar para personas de todas las edades. Hay quienes disfrutarán de especies como caballos de mar que generan un brillo lila al interactuar con un tipo de luz especial. Otros, pueden acercarse a las salas y salones que dispone el lugar, donde ocurren charlas y se exponen documentales sobre la vida marina y su preservación.
“Este es el único museo en su tipo en Estados Unidos. Buscamos que nuestros visitantes se familiaricen con estas especies y que lo que aprendan les sirva para proteger la vida marina”, explica una de las guías durante el recorrido.
La entrada para adultos es de US $12 y el recorrido tradicional es de unos 45 minutos. Sin embargo, el museo ofrece diferentes actividades de interacción con las especies marinas que pueden variar su precio. Por ejemplo, cuentan con un acercamiento a su pulpo gigante, cuyo precio es de US $500 por grupo de cuatro personas.
En uno de sus pisos, el museo incluye una exposición sobre las conchas y su relación con la moda. Los guías explican cada pieza, su inspiración y como, por ejemplo, por medio de ellas se adquieren colores que en algún momento fueron exclusivos para las personas más ricas, como el purpura.
El Bailey-Matthews National Shell Museum & Aquarium es un interesante plan en su visita a Florida. Un espacio para compartir en familia y aprender de expertos la importancia de la vida marina en nuestras vidas.
