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Por el delito de desaparición forzada agravada, un juez condenó a 42 años de prisión a Angélica María Gil Blanco, la mamá de Jhosuar David, quien desapareció en mayo de 2024, luego de que quedó captado en el video de una cámara de seguridad montándose a una motocicleta con la mujer.
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El niño desde que tenía ocho meses estaba bajo la custodia de sus abuelos maternos, debido a que sus padres, Angélica María Gil y José Mariano Mejía Fuentes, tenía problemas de drogadicción, según indicó en su momento la familia. Cuando se registró la desaparición, Angélica María vivía en el municipio de La Paz con otra pareja, pero visitaba regularmente a su hijo en Valledupar.
El día que se registró el hecho, la mujer llegó en una motocicleta, vestida de mototaxista. El niño la reconoció y se le acercó corriendo. En las imágenes que registró la cámara de seguridad se ve que tienen una corta conversación y luego el niño se sube al vehículo con ella.
Lo que viene después es incierto. Angélica María asegura que el niño quería dar una vuelta, por lo que lo subió a la moto como se ve en las imágenes, luego le compró unas papas y una gaseosa, y finalmente lo dejó en una esquina diferente a la que los recogió.
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La juez señaló que en la primera entrevista, Angélica María “dijo que había dejado al niño porque vio que ahí estaba Luis Marino, su papá, y a ella le pareció bien dejarlo para que se fuera con él”, lo que después fue desmentido por el hombre. Sumado a esto, la Fiscalía indicó que la mujer en verdad concertó con su pareja del momento para encontrarse en la terminal de transporte de Valledupar, a donde llegó con el niño.
Además, el ente investigador resaltó que “a pesar de haber sido consultada por las autoridades acerca del paradero de su hijo, (Angélica María) nunca entregó información que contribuyera a ubicar al menor”.
Tras conocerse la condena, la mujer fue trasladada al establecimiento Penitenciario y Carcelario de Alta y Media Seguridad de Valledupar. Hasta el momento, no se conoce el paradero del niño.